Si hay algo que defina a Japón son los samuráis, de los que Kenshin os presentó sus orígenes hace unos días. Y si hay un nombre que resuena más que cualquier otro en ese mundo es el de Miyamoto Musashi. Hijo de samurái, vagabundo, portento físico y de la espada, guerrero imbatible y, en el tramo final de su vida, artista consumado, hábil estratega y maestro creador de nuevos estilos de combate su vida bien podría ser un guión de cine. La estela de su leyenda recorre buena parte del ideario nipón sobre su época. La figura de Miyamoto Musashi se hace presente en infinidad de propuestas, desde el Yaiba! de Gosho Aoyama, a cameos videojueguiles en Dinasty Warriors o Soul Calibur u homenajes desde el otro lado del Pacífico, como Usagi Yojimbo.
Sea como sea, si tuviera que elegir una obra de cualquiera de nuestras "subculturas" favoritas para hablaros de la figura de Miyamoto Musashi sería sin dudarlo la que nos ocupa hoy: Vagabond, de Takehiko Inoue, un manga que va por su tomo 33 y que cuenta con sobrados argumentos para convertirse en uno de los referentes de su género.
Vagabond es, por así decirlo, una biografía no autorizada de Miyamoto Musashi narrada con una perfección de estilo que demuestra el mimo que el autor ha puesto en todos y cada uno de los detalles del proceso creativo, documentación histórica incluida. Un trabajo que ha sido reconocido en multitud de nominaciones a premios importantes, tanto dentro como fuera de Japón.
Y es que el estilo de Inoue no deja indiferente: cruento, realista e impactante como pocos viene que ni pintado para relatar cruces de katanas, sangre, tensión y combates que se deciden a la velocidad del rayo, al tiempo que presenta una imagen para nada edulcurada de Musashi diferente, por lo realista, de lo acostumbrado.
Como es marca de la casa en 5 Minutos Más, no entraré a destripar el argumento ni a adentrarme en exceso en la trama o los personajes. Eso os lo dejo a vosotros, para que saboreéis Vagabond por vosotros mismos sin más información que la que necesitáis para saber si será una obra de vuestro agrado.
Ya nos contaréis.
Ya nos contaréis.
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