"La historia gira en torno a Take Seiji, que deja su trabajo después de tres meses. Sin sueños, sin ahorros, y con una mala relación con su familia, se convierte en un hikikomori. Sin embargo, después de que su madre se enferma con depresión, termina encima de tener que tener un trabajo a tiempo parcial en una obra en construcción. Por eso decide trabajar para reconstruir su vida. "A pesar de que sólo soy un freeter, compraré una casa por el bien de mi familia." En la obra en construcción conoce a Chiba Manami, quien es todo lo contrario a Seiji. Pero mientras que sus personalidades chocan al principio, poco a poco llegan a entenderse entre sí."
No es de extrañar que muchos actores japoneses sean polifacéticos y acaben con un amplio curriculum a sus espaldas, unos con más éxitos que otros, está claro. Pero quizá el nombre de Kazunari Ninomiya recuerda a esos chicos de oro protegidos por un aura especial que les concede un estatus especial y prioritario en casi todo lo que hacen. ¿Si os digo "Cartas desde Iwojima", de Clint Eastwood? Quizá no os sonará pero, ¿y si digo "Nino de Arashi"?...
Efectivamente, este joven de 28 años se lanzó a la fama hará ya unos 4 o 5 años cuando era parte del exitoso grupo "Arashi", sobre todo después de la inclusión del single de "Hana Yori Dango 2" que está entre sus 5 canciones más conocidas.
Pero ya empezó debutando en 1998 como actor, sobre todo en la pequeña pantalla, participando en series como "Ryusei no Kizuna" o "Saigo no Yakusoku", este último compartiendo plano con el resto de sus compañeros de banda.
Eso sí, yo personalmente no recuerdo haber visto interpretando un rol tan serio y elaborado como en la serie que nos corresponde mencionar hoy: "Freeter, ie wo kau" フリーター、家を買う (Freeter, compra una casa).
"Freeter" o フリーター no es más que uno de esos términos acuñados por japoneses para describir a los grupos de jóvenes (y no tan jóvenes) que podríamos calificar como "Ni-Ni" en nuestra sociedad, es decir, aquellos que todavía viven en casa de sus padres pero sin trabajo o con trabajos temporales que no les permite una independencia económica total.
Ese es pues, el papel de Kazunari Ninomiya interpretando a Seiji Take, un joven que se licencia en la universidad y tiene puestas altas expectativas en su futuro laboral, tanto que acaba pecando de soberbia, infravalorando todo aquel puesto de trabajo que él no considera apto para él.
Lo mejor de la serie, para mí, es el acoso de los problemas personales y económicos a los que Seiji se enfrentará a lo largo de los capítulos. El drama japonés deja en este caso de lado la exagerada ponderación de situaciones forzadas y poco creíbles para dar a conocer los problemas habituales a los que se podría ver a cualquier familia corriente, sin caer tampoco en las enmarañadas reflexiones de otros títulos más pretenciosos.
El romance también tendrá su papel en esta serie, pero queda en un plano secundario perfecto que no agobia ni hace olvidar a los espectadores cuál es la función principal del argumento. Este rol le corresponde a la bella actriz Karina que interpreta a una compañera de trabajo de Seiji, al que ayudará a recomponer su situación y al mismo tiempo se cambiará a ella misma.
Ya la pudimos ver actuar en otros dorama como el sensacional "Banbino!" del que ya hablaremos y nos queda pendiente una de sus últimas apariciones en la pequeña pantalla, "Misaki Number One!!" (sí, que manía de poner exclamaciones a los títulos...) para poderos informar como es debido.
Tampoco es perfecta, he de reconocer. El papel de la madre de Seiji (Ryoko Sakaguchi) deja bastante que desear, es exagerado, poco creíble y se hace tedioso en muchos puntos del dorama.
Excluyendo lo anteriormente mencionado, "Freeter, ie wo kau" es una serie que no os debéis perder. Con un rating de 17,5% de media de los 10 capítulos emitidos, fue calificada por la mayoría de espectadores como la mejor serie de 2010, oficialmente premiada con el Grand Prix por la Tokyo Drama Awards 2011 en la categoría de series, mientras que Kazunari Ninomiya recibió el premio a la Mejor Actuación Masculina, como debía ser.
¿Cuántos Minutos Más se merece (sobre 5)?
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