Si sois de los que disfrutáis con los anime chorras y
degenerados, que hacen que te partas la caja de risa un buen rato, esta es
vuestra mejor opción.
El protagonista de esta serie de humor metalero es Soichi
Negishi, un chaval tímido y bonachón que sueña con ser cantante de música pop
suiza. Vive en un pueblo a las afueras de la gran ciudad hasta que llega la
hora de ir a la universidad y… bueno, las cosas no siempre salen como uno
espera. Sin saber cómo, nuestro protagonista acaba liderando una banda de Death
Metal llamada “Detroit Metal city” (DMC). Cuando se enfunda en su demoníaco
traje y saca a relucir su guitarra y su poderosa voz aparece su alter ego “Johannes
Krauser II” (Krauser-sama para los amigos).
La leyenda de Krauser-sama empieza a propagarse rápidamente
junto con la popularidad del grupo. Que si es un demonio salido del infierno,
que si es un terrorista que ha matado y violado a sus padres (las letras de las
canciones no tienen desperdicio)…
En realidad el pobre Negishi odia profundamente todo lo que
el grupo representa e intenta hacer carrera como cantautor por las calles
niponas pero la gente pasa olímpicamente de él.
La chica de la que está enamorado es periodista de una
revista muy chic de la que Negishi es fan.
Todo esto combinado con una serie de personajes cafres y
descerebrados (como la manager del grupo o el cerdo capitalista, entre otros...) junto a las situaciones mas absurdas que os podáis imaginar dan
como resultado un obra maestra de la animación (y el manga) japonesa.
La serie tiene hasta una película con personajes reales
(live action) que, en mi humilde opinión, no le hace justicia.
Os invito a que le echéis un vistazo a este diamante en
bruto. ¡Ya nos diréis qué os ha parecido!
2 comentarios:
¿Ese live action es el que me hiciste traga...digo "ver"? ><
Va a ser que si! Lo sé, es un pastel de Teruel... Pero no me negaras que el anime es la caña de España!!!!
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