Eres un japonés de 29 años sin un trabajo estable, sin novia desde que tienes uso de razón, virgen y prácticamente sin vida social. Supongo que algún día te levantarás y te preguntarás qué es lo que estás haciendo mal para estar en una situación tan crítica a una edad en la que ya empezamos a hacer facturas de nuestro estilo de vida hasta ahora.
Pero, ¿qué me decís si os levantáis un día y vuestro "moteki" surge de repente? Moteki (モテキ) es ese periodo que todos seguramente hayamos tenido en el que somos de repente un imán para las mujeres, o al menos creemos serlo. La depresiva inactividad de tu móvil se ve sustituida por llamadas de cuyas personas ni te acordabas y que al parecer están deseando retomar el contacto contigo...en todos los sentidos.
Para Fujimoto, el protagonista de este manga del autor Kubo Mitsurou convertido a dorama, su oportunidad por fin ha llegado y durante 12 capítulos delirantes tratará de comprender este suceso y, con ello, dar un sentido a su vida. Su principal preocupación es dejar de ser virgen, pudiendo elegir por primera y única vez en su vida entre 5 mujeres impresionantes, cada una con su propio estilo y personalidad.
Pero nuestro protagonista es lo que llamamos una persona con buenas intenciones y con instintos sexuales reprimidos. Es totalmente cínico con lo que ocurre a su alrededor y dará tantas vueltas a las inexplicables situaciones que se le aparecen que cada capítulo es un intento erróneo, y a la par divertido, de hacer las cosas bien y acabar con esa tortura que le ha perseguido siempre.
En la serie se combina perfectamente la comedia más disparatada, que es posible gracias a que en todo momento sabemos lo que piensa Fujimoto (al estilo narrador de Zach Braff en "Scrubs"), con el toque de drama necesario que acaba por dar tangibilidad al alma del protagonista. Nos metemos en la mente de este pobre desgraciado y sentimos alegría por él, tristeza, pena,...mientras vemos como intenta ser feliz.
A todo eso sumamos las escenas subidas de tono, la historia de cinco chicas con carisma y la evolución de estas y otros amigos de Fujimoto, sin olvidarnos claro está de la moraleja que nos encontramos tras algunos capítulos y el final.
En conclusión, Moteki es un guión excelente, una serie completísima; pero sobre todo, Moteki es Moriyama Mirai (el actor tras Fujimoto), que ya nos hizo reír en su papel en Water Boys (criticada por muchos de mis amigos por ver demasiados tíos juntos en bañador...ya hablaré de esta serie,xD). Su cara, sus gestos y su forma de actuar dan la excelencia a este dorama japonés, de lo mejor del pasado 2010.
Y si os quedáis con ganas, este septiembre se estrenó la adaptación a la gran pantalla. Misma historia, diferentes chicas, pero mismo protagonista.
¿Cuántos Minutos Más se merece "Moteki" (sobre 5)?
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