De entre todas las series canceladas habidas y por haber la mas injustamente tratada ha sido Carnivàle. Quizá no es fácil de digerir al principio. Quizá la desolación y la oscuridad que exuda no son del agrado de todos. Quizá no plantea los personajes que todo el mundo espera (¿es bueno el “bueno”? ¿Es malo el “malo”? ¿Ese no es el enano de Twin Peaks?). Mi criterio me obliga a sentenciar que no es la serie, es el público. Desde luego no atrae a usuarios medios de la prensa rosa (“House” sí que lo hace, que se sienta ofendido quien quiera), a adictos a Gran Hermano (“Lost” sí lo hizo) y… y… lo cierto es que no sé con quién mas meterme (es mentira, pero no quiero que la Ira del Khan recaiga sobre mi), tan solo deseo materializar mi indignidad en forma de palabras. Sin más preámbulos pasamos a la sinopsis.
Hay un cura malo y un ex-presidiario bueno. A tomar por culo la sinopsis.
¿Qué, os ha gustado? Pues es lo que han hecho con una serie que catalogaría de obra maestra, cortarla habiendo dado tan solo pinceladas de su potencial.
Ahora sí, la sinopsis:
Estados Unidos de América, 1929.
Es bien sabido que los poderes del mal y del bien han estado enfrentados siempre. Lo que no se sabe es que cada 1000 años estos poderes cobran vida y deben enfrentarse bajo la forma de dos elegidos, dos campeones (muy poco ortodoxos, por cierto). El elegido de la oscuridad es el padre Justin, un buen sacerdote que se sacrifica por su comunidad y que vive con su hermana. El elegido de la luz es Ben, un ex–presidiario introvertido y antipático que se une a un circo ambulante plagado de freaks, alguno de ellos vinculados con el tarot e incluso la magia negra.
Las vidas de los protagonistas discurren por dos líneas muy diferentes a lo largo de la primera temporada y empiezan a confluir en la segunda (y última) temporada.
Los personajes secundarios, la fuerte trama argumental, la ambientación, el reflejo de la doble moral tan establecida en la sociedad americana (eso dicen, yo no he estado ahí), y todos los elementos ocultistas, no tan fáciles de apreciar a primera vista (quizá esto es lo que perturba a la gente sin que ellos lo sepan y por eso cambian de canal), hacen de esta serie una gran obra audiovisual.
Dadle una oportunidad, no os defraudara.
4 comentarios:
La verdad es que me da pereza ver una serie que sé que no va a tener más de una temporada. Es lo más frustrante.
Y tienes razón con lo de House y similares. Son series que deberían tener un par de temporadas o tres y coronarse en su muerte, pero alguna movida que no entiendo las mantiene ahí. Y hay personajes mucho más carismáticos k House...
Son dos temporadas! XD
><
Da igual, la pregunta clave es: ¿le pegan un espadazo al final de la 2ª temporada y la dejan como la última temporada de Héroes o de alguna forma queda cerrado?
Queda totalmente inconcluso XD
Se van a enfrentar cara a cara y... CENSORED.
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